Las agresiones energéticas que nos envían pueden ser neutralizadas
de la siguiente manera:
Durante tres semanas consecutivas finaliza tu baño derramando
sobre tu espalda una jarra de agua a temperatura ambiente, en la
que habrás disuelto previamente tres cucharadas de sal marina.
Antes de dejar tu casa, toma una pizca del mismo tipo de sal con tu
mano izquierda y arrójala hacia atrás, sobre tu hombro derecho.
Mari Santera