Como ejercer presión sobre un enemigo
Altar 1 Figura Altar 2
Incienso
Gris 1 Amarillo/Verdosa Negra Purpura
Gris
1.Encienda las velas del altar 1 y 2. 2. Encienda el
incienso. 3 Encienda la vela negra pensando en el enemigo. 4 Encienda las velas
grises 1 y 2 pensando en la frustración agobio. 5.Encienda la vela
amarilla/verdosa pensando en la cólera, la discordia, la enfermedad, el miedo.
6.Encienda la vela purpura pensando pensando en la tensión, los nervios. Piense
por un momento en su enemigo: se siente completamente solo, lleno de inseguridad,
nervioso y aterrorizado. 7.Luego diga:
Salmo 70
>>Apresúrate, Dios, en preservarme; date prisa, Señor; en
socorrerme. Deja a aquellos que ambicionan avergonzar mi alma y quieren
confundirla: Déjelos que se den la vuelta y se avergüencen por gozar con mi
herida. ¡Se han dado la vuelta, eso es, les corresponde la vergüenza! Señor,
deja que todo goce en ti, la alegría que busco en ti: Deja a aquellos para los
que tu salvación de amor aun no es, alabado seas, Señor. Pero soy tan pobre y
estoy tan necesitado; ven a mí, Señor; no me hagas esperar: Tu ayuda y liberación;
Señor; no te retrases>>
8.Apague la vela negra.
9.Sientese unos instantes pensando en cuan confuso esta su
enemigo. Luego, vuelva a encender la vela negra y diga: >>Apresúrate, Dios,
en preservarme; date prisa, Señor; en socorrerme. Deja a aquellos que
ambicionan avergonzar mi alma y quieren confundirla: Déjelos que se den la
vuelta y se avergüencen por gozar con mi herida. Se han dado la vuelta; ! eso
es, les corresponde la vergüenza. Señor; deja que todo goce en ti la alegría
que busco en ti: Deja a aquellos para los que tu salvación de amor aun no es, alabado
seas, Señor.
Pero soy tan pobre y
estoy tan necesitado; ven a mí, Señor; no me hagas esperar: Tu ayuda y liberación;
Señor no te retrases>>. 10.Sientese se nuevo pensando en su enemigo y
cuan confuso esta. Luego, apague todas las velas. Repita el ritual la noche
siguiente, moviendo unos centímetros hacia el centro las amarillo/verdosa y
purpura. Repítalo cada noche hasta que se toquen, con la vela negra.
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