Debe esperar la tercer noche de luna en cuarto menguante. Limpie una superficie plana con agua y vinagre, y coloque en el centro un espejo redondo con la superficie que refleja hacía arriba. Rodee el espejo con un círculo de sal fina. Luego, deposite sobre él cuatro pizcas de sal.
Deberá poner tres velas blancas, a las que habrá ungido previamente, rodeando el circulo del espejo de tal forma que se haga un triangulo. Eche sobre cada una de las velas una pizca de sal, y enciéndalas. Deja que se vayan consumiendo hasta su totalidad, y retira todo echando la sal a un desagüe.
